martes, 1 de mayo de 2012

La Edad Media Mediática

La oscuridad del medievo se instala en nuestros televisores a través de la que está siendo la más famosa producción televisiva: Juego de Tronos. La épica serie mezcla sútiles dosis de fantasía con fuertes ingredientes de una realidad histórica oscura: la Edad Media. Porque colgar la cabeza de un traidor después de haberlo matado con las más desarrolladas técnicas de tortura, era la forma de las dinastías medievales de asegurar su poder manifestado en la venganza, y por otra parte, la forma de saciar el hambre de un vulgo ignorante que jadeaba ante tales actos de crueldad ilimitada.



Pero éste periodo que tan lejano nos puede parecer y que tantas connotaciones negativas representa, debería ser tratado con más respeto ya que no sólo somos hijos del siglo de las Luces, sino también lo somos de estas sombras arcaicas de un pasado muy negro. La serie tiene mucho de medieval: el papel de las mujeres como reinas, brujas, prostitutas o madres. Los mandatarios homosexuales escondidos en matrimonios interesados, una necesidad de descendencia legítima que permitiera la perpetuidad en el poder, los bastardos conocidos y los bastardos ocultos, y como no, los traidores, los que no dudaban en saltar de un bando a otro. Todo un escenario épico, muy real y frío, al que se suben todas las criaturas de este mundo, y de otros. Criaturas, que permaneciendo en la oscuridad, nos dejan oir su respiración, percibir su presencia y augurar los peores acontecimientos.

En definitiva, la serie nos trae una nueva Edad Media, que se suma al imaginario colectivo gracias a su violenta y sangrienta forma de seguir viva a pesar del paso del tiempo. Una Edad Media, que alimenta como al vulgo ignorante, nuestras ganas de venganza. Pero sin duda una venganza mediática, ya que ningún seguidor de la serie soportaría ni una milésima parte de esa tortura, si los actos ocurrieran en la plaza pública (menos mal, que también somos hijos de la Ilustración).

La moda más "freak"

Ver uno tras otro los capítulos de Big Ban Theory hace que uno llegue a desear convertirse en físico, vestir como Leonard y Sheldon y pasar las tardes sentado en el sofá jugando a algún videojuego o comentando algún incomprensible experimento. Claro que, lo que ningún macho-alfa podrá envidiar a estos inusuales personajes, son sus dotes para ligar, y sus poco acertadas cualidades para las relaciones sociales.

En un medio como el televisivo, donde lo que abundan son los cuerpos bellos y los seres superiores en fuerza, estos cuatro amigos de cuerpos delgados y poco atléticos, apasionados de las fiestas de disfraces, vienen a colmar y divertir a una audiencia cuyo gusto por lo más "freak" se ha convertido en tendencia. Ser inteligente y arrogante, vibrar al escuchar la banda sonora de Star Wars y vestir con un look vintage hacen diferente a cualquiera, y parece ser que se ha puesto de moda.

Está claro que el guión, no es novedoso. Original y con mucha chispa, pero la base de la historia es la misma de siempre: chico inteligente, macho-beta, conoce y se enamora de chica super chic quien normalmente se relaciona con machos-alfa. La inteligencia supera a la fuerza como bien dice el refrán, y triunfan los machos-beta. La moraleja también es conocida; estudia mucho y no tengas miedo a ser un freak, porque es lo último, y convertirte en uno no te hace estúpido sino simplemente diferente.

Contraindicaciones: Toma las dosis necesarias de "frikismo" porque ser un freak es una cualidad natural, asi que no exageres ya que, mezclado con arrogancia te puedes convertir en un extraño ser, con una triste vida social y muy pocas posibilidades de tener éxito.